A finales de los 90, Volvo ponía fin a la era de los coches clásicos de propulsión trasera, siendo los modelos S90 (berlina) y V90 (familiar) los últimos representantes de esta legendaria línea. Estos vehículos combinaban conservadurismo escandinavo, fiabilidad y elegancia, dejando huella en la historia del automóvil.
Tipos de carrocería y características
La gama 1997-1998 solo incluía dos carrocerías:
-
Volvo S90: berlina de 4 puertas con proporciones clásicas: capó largo, líneas sobrias y parrilla característica
-
Volvo V90: familiar de 5 puertas, sucesor del mítico Volvo 945, pero con diseño más moderno
Ambos modelos compartían la plataforma del Volvo 960, actualizada antes de su lanzamiento. Sus diferencias principales respecto a sus predecesores eran formas más redondeadas, nuevos faros y detalles cromados que les daban un aire premium.
Material de los parachoques (puede variar):
Polipropileno, terpolímero de etileno, propileno y dieno. Marcado >PP+EPDM<
Cómo quitar el parachoques delantero
-
Abrir el capó
-
Quitar tuercas y retirar los brazos con los lavafaros
-
Desde el vano motor, desatornillar las tuercas que fijan el refuerzo metálico a los soportes (anclados a la carrocería)
-
Girar las ruedas alternativamente hacia el interior de los pasos de rueda
-
En los pasos de rueda, quitar remaches (o tornillos)
-
Con ayuda, deslizar el parachoques hacia adelante sacándolo de las guías en los guardabarros
-
Desconectar los conectores de los antinieblas (si lleva)
Cómo quitar el parachoques trasero
-
Abrir el maletero
-
Desde la parte inferior, desatornillar tuercas que sujetan los soportes al refuerzo (o a la carrocería)
-
En los pasos de rueda, quitar remaches (o tornillos)
-
Con ayuda, tirar del parachoques hacia atrás (cuidado con los cables)
-
Desconectar los conectores eléctricos (si lleva)
Ficha técnica y motores
Ambos modelos montaban el mismo motor de 6 cilindros en línea de 2.9 o 3.0 litros (B6304S/B6304S2) con 204 CV. Uno de los últimos motores atmosféricos Volvo con inyección Bosch y bloque de hierro - robusto pero poco económico.
Transmisión: automática de 4 velocidades o manual de 5 (más rara). Solo propulsión trasera, algo que las hacía especiales frente a los posteriores Volvo de tracción.
Suspensión independiente con muelles y amortiguadores para mayor confort, aunque con una conducción poco deportiva: estaban pensados para un manejo relajado.
Interior y equipamiento
El habitáculo era típico de los 90: materiales nobles, inserciones de madera, asientos de piel calefactables y ergonomía orientada a viajes largos.
Equipamiento destacable:
-
Climatizador con regulación independiente
-
Pack eléctrico (ventanillas, espejos, techo)
-
Control de crucero y potente equipo de audio
-
En el V90: maletero enorme (hasta 1640 litros)
La seguridad, sello Volvo, era impecable: airbags, ABS, carrocería reforzada.
Datos curiosos
-
Últimos Volvo de propulsión
-
Escasos en el mercado de ocasión (solo 2 años de producción)
-
Apariciones en cine y TV de los 90
-
El familiar V90 más cotizado que la berlina
-
Algunos entusiastas las modifican hasta 300 CV
Conclusión: ¿por qué siguen siendo valorados?
Los S90/V90 representan el final de una era de Volvo grandes, robustos y de propulsión. Se valoran por su fiabilidad, facilidad de reparación y encanto retro. Aunque su rendimiento y consumo no igualan a los modelos actuales, para los amantes de los clásicos esto es secundario.