Introducción histórica
Cuando Volvo presentó en 1998 su nuevo modelo insignia, el S80, marcó un punto de inflexión para la marca sueca. Este vehículo no solo sustituyó a los anticuados Volvo 960/S90, sino que se convirtió en el primer sedán de la compañía desarrollado sobre la innovadora plataforma P2, que posteriormente serviría de base para el Volvo S60 y el SUV XC90. El S80 aunaba el característico diseño escandinavo, tecnología puntera y, como no podía ser de otra manera en Volvo, una seguridad legendaria.
Rediseño 2003: Evolución discreta pero relevante
El año 2003 trajo consigo un rediseño del Volvo S80 que afectó tanto a su estética como a su parte técnica. En el exterior, el automóvil recibió nuevos faros con una gráfica más refinada, una parrilla del radiador actualizada y parachoques con ligeras modificaciones. Los grupos ópticos traseros también adoptaron un diseño más contemporáneo, aunque conservando el lenguaje estilístico distintivo de Volvo.
El habitáculo mejoró notablemente su confortabilidad: se incorporaron nuevos materiales de revestimiento, se optimizó la insonorización y se modernizó el sistema de entretenimiento. No obstante, las modificaciones más significativas se centraron en los propulsores, con la introducción de unidades más potentes y eficientes, destacando especialmente el 2.9 T6 biturbo de 300 CV como buque insignia de la gama.
Composición de los parachoques (puede variar):
El material empleado consiste en polipropileno combinado con un copolímero ternario de etileno, propileno y dieno, con un 15% de carga mineral. La denominación técnica es >PP+EPDM-T15<
Procedimiento para retirar el parachoques delantero
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Inicie abriendo el capó del vehículo.
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Extraiga los pasadores de fijación (insertados verticalmente de arriba hacia abajo) que aseguran la sección superior del parachoques delantero.
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En caso de estar presentes: desenrosque las tuercas y retire los mecanismos de lavado de faros junto con sus brazos articulados, procediendo luego a desconectar los conductos de los inyectores.
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Retire los pilotos repetidores de intermitentes (deberá ejercer presión en el ángulo más próximo a la rueda).
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Libere las cubiertas situadas bajo los faros (centrándose en el ángulo cercano a la parrilla; no es necesario extraerlas completamente).
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Desatornille los dos tornillos ubicados bajo dichas cubiertas.
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Localice y desenrosque los dos tornillos situados en la rejilla inferior (pueden estar ocultos tras tapas protectoras).
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En los arcos de las ruedas, elimine los cuatro remaches metálicos existentes en cada lateral (posteriormente podrán sustituirse por tornillos o pasadores).
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(Para modelos 2004-2006) Tras los guardabarros, desatornille dos tornillos adicionales.
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Desde la parte inferior del vehículo, extraiga dos pasadores de fijación.
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(Para modelos 2004-2006) Libere los mecanismos de enclavamiento en los guardabarros y, con asistencia de otra persona, retire el parachoques ejerciendo tracción hacia adelante (extremando la precaución con los cables).
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(Para modelos 1998-2003) Con ayuda, deslice el parachoques hacia adelante siguiendo las guías de montaje en los guardabarros (cuidando especialmente el cableado).
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Desconecte todos los conectores eléctricos asociados (si los hubiera).
Procedimiento para retirar el parachoques trasero
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Comience abriendo la tapa del maletero.
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Levante el revestimiento del piso y retire la batería del vehículo.
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Libere los revestimientos laterales y retire el panel trasero (para obtener acceso a la estructura interna del parachoques).
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A través de los orificios practicados en el panel posterior, desenrosque las tuercas de fijación (cuatro tuercas para modelos 1998-2003, seis para versiones 2004-2006).
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En los arcos de las ruedas, elimine los cinco remaches metálicos existentes en cada lateral (pudiéndose sustituir posteriormente por tornillos o pasadores).
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Dentro del maletero, desatornille el conector de la antena.
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Con asistencia, retire el parachoques ejerciendo tracción hacia atrás siguiendo sus guías de montaje.
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Desconecte todos los conectores asociados al sistema de ayuda al aparcamiento (si estuviera equipado).
Aspectos técnicos destacados y oferta motriz
El Volvo S80 de primera generación presentaba una amplísima gama de propulsores, desde los modestos 2.4 litros atmosféricos hasta las prestacionales versiones con turbocompresor. Especial mención merece el 2.5 TDI, un diesel turboalimentado muy valorado por su fiabilidad mecánica y generoso par motor. Sin embargo, la verdadera joya de la corona era el 2.9 T6 biturbo, que entregaba 272 CV (incrementados a 300 CV tras el rediseño), permitiendo al pesado sedán acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 6.9 segundos.
Las opciones de transmisión abarcaban desde la caja manual de cinco velocidades hasta los automatizados de cuatro y cinco relaciones. La tracción, exclusivamente delantera, representaba el estándar de Volvo durante aquel periodo.
Seguridad: El emblema de Volvo
Fiel a su filosofía, el S80 destacaba extraordinariamente en protección pasiva. De serie incorporaba airbags frontales, cortinas laterales, sistema ABS y control de tracción TRACS. Las versiones más equipadas añadían ESP y sensores de presión de neumáticos.
Destacaba especialmente el sistema WHIPS (Whiplash Protection System), diseñado para prevenir el latigazo cervical en colisiones traseras mediante unos reposacabezas y asientos de diseño específico.
Datos curiosos sobre el Volvo S80 primera generación
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En 1999, el S80 se convirtió en el primer modelo Volvo en ofrecer navegación GPS como equipamiento estándar en sus versiones tope de gama.
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Este modelo fue pionero en implementar el sistema DSTC (Dynamic Stability and Traction Control), precursor del actual control de estabilidad.
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Contrariamente a su imagen de sedán ejecutivo, el S80 fue utilizado operativamente por la policía sueca en misiones reales.
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En 2006, como colofón a su ciclo vital, Volvo presentó una edición limitada "Executive" con acabados premium y equipamiento exclusivo.
Legado del modelo
La primera generación del S80 permaneció en producción hasta 2006, dando paso entonces a su sucesora. No obstante, fue este modelo el que estableció los cimientos del éxito de la serie, combinando como ningún otro confort, seguridad y esa particular elegancia escandinava. En la actualidad, representa una opción sumamente interesante en el mercado de ocasión para aquellos conductores que valoren por encima de todo la fiabilidad mecánica y un carácter diferenciador.